Lisbeth Santana: “Puedo dar mucho más”

El CD Waterpolo 98 02, pese a no conseguir el ansiado ascenso a la División de Honor del polo acuático femenino español, tuvo muy buen desempeño en la recién finalizada temporada.

En gran medida, el tercer escaño alcanzado se debió al arribo de la cubana Lisbeth Santana al elenco pamplonés, ya que la boya camagüeyana llegó para redondear el siete titular del entrenador Imanol Maiza, pues, más allá de los 14 goles en solo diez partidos, la polista antillana destacó por su tremendo aporte defensivo.

Sobre su paso por la Primera División de España, Carales WP conversó, recientemente, con Lisbeth Santana, quien siente que pudieron haber conseguido el ascenso al máximo nivel.

El CD Waterpolo 98 02 estuvo muy cerca de disputar el play-off de ascenso a la División de Honor, pero se cayeron al final. ¿Qué pasó?

Estuvimos muy cerca, la verdad. Pasamos a la segunda fase ocupando el primer lugar y con ventaja, pero nos fuimos del ritmo de competencia cuando nos aplazaron dos partidos, debido a que el equipo contrario tenía jugadoras con COVID-19.

Luego, estuvimos dos semanas confinadas porque una compañera resultó positiva a la enfermedad. Todo esto atentó contra nuestra forma física e influyó en el rendimiento del equipo.

-De forma general, ¿cómo te sentiste en esta temporada?

Me sentí bien, pero sé que puedo dar mucho más, llegue aquí sin entrenar, prácticamente, y fui entrando en calor a medida avanzaba la temporada. Sé que, para la próxima campaña, estaré mejor preparada, pues entrenaré desde la pretemporada y eso me va a ayudar mucho.

¿Qué diferencia hubo entre la Lisbeth Santana que llegó a España y la que terminó tercera en la Primera División?

Hubo muchos cambios, sobre todo de mentalidad, porque vengo de una selección cubana donde estamos acostumbradas a entrenar, entrenar y entrenar para competencias que duran una semana.

En Cuba podemos estar preparándonos el año entero para un solo torneo, mientras que aquí entrenamos semanal para jugar solo los fines de semana. Es muy diferente.

-¿Contra qué equipos te gustó jugar?

Yo llegué faltando solo diez partidos para el final de la temporada y los que más disfruté fueron contra el AE Santa Eulalia en su sede, el Real Canoe NC aquí en Navarra, también, con el CN Atletic-Barceloneta en Catalunya.

Este último, con el cual cerramos la temporada, lo disfrutamos mucho como equipo, porque les ganamos y nos quedamos con ese sabor a victoria que nos motiva a buscar el ascenso, nuevamente, en la próxima campaña.

-A pesar de ser la boya, en ocasiones debiste asumir la defensa central y no hubo quien que te ganará la posición. Coméntanos al respecto.

A decir verdad, mi posición favorita en el polo acuático es la defensa. Yo empecé a practicar boya después del parto, debido a mi peso corporal en ese momento (98kg), porque el poste lo debe ocupar una jugadora corpulenta y fuerte.

Casi que me obligaron, porque en la selección cubana no había boyas en ese momento y yo era la única opción que quedaba para esta posición. No obstante, acepté y le fui cogiendo la vuelta de a poco.

Pero mi posición, dónde me siento más cómoda, es la defensa. Me encanta defender, pues de ahí parte la victoria de cualquier juego en equipo.

Este año me fue muy bien ocupándola a pesar de no haberla entrenado en mucho tiempo y no dedicarle casi espacio aquí, durante el horario de preparación.

-¿Viviste algún momento difícil durante la temporada?

Sí, tuve varios momentos difíciles, sobre todo a nivel psicológico. El más difícil fue la pérdida de mi hermano; me afectó demasiado el estar lejos de mi familia en ese momento.

Me quedé sin palabras, tengo un nudo en la garganta mientras te escribo. Trato de no pensar en eso porque me vengo abajo, siento que me derrumbo.

-¿Qué gol disfrutaste más?

Un gol siempre es motivo de alegría, porque es algo primordial que le aportas al equipo, pero, si debo resaltar uno, sería el último, contra el Barceloneta. Lo disfruté mucho.

-¿Qué crees haberle aportado al CD Waterpolo 98 02?

Aporté expulsiones, penaltis, también abrí espacios, pues me cerraban en el poste y mis compañeras podían jugar más libremente. Tenemos buenas tiradoras de la larga distancia en el club y, cuando venían a tapar la boya, ellas podían tirar de atrás con más efectividad.

No obstante, creo que le puedo aportar más al equipo. Espero sentirme mucho mejor para la próxima temporada y ser más útil.

-Los desplazamientos de una ciudad a otra es algo que causa diversas sensaciones. ¿Los disfrutaste?

Realmente, son un poco agotadores. Sí, se disfruta el viaje, pero el regreso, porque en la ida todo el mundo va como dormido, concentrado en el partido. Lo positivo es que juegas en diferentes instalaciones y eso si es una experiencia gratificante.

-¿Cuáles son las proyecciones para la próxima temporada?

El entrenador, Imanol Maiza, quiere mantener el mismo bloque de atletas para seguiros consolidándonos como equipo. Somos un elenco joven con mucho futuro, cuya meta es seguirnos superando y aportar lo mejor de nosotras para conseguir ese ansiado ascenso a la División de Honor.

En lo personal, mi intención es sacar todo mi potencial para la próxima temporada, porque sé que puedo dar mucho más en la piscina.